sábado, 24 de enero de 2015

Asexuales: el deseo 'amputado'

  •  El 1% de los jóvenes no siente atracción ni por hombres ni por mujeres.
  •  No rechazan el sexo ni tienen aversión hacia él .
  •  La asexualidad también se ha constatado en animales. 
  •  No tiene nada que ver con fobias o episodios traumáticos. 
El mundo está lleno de ejemplos, pero la palabra produce todavía distancia, desconocimiento e, incluso, cierta desconfianza. La asexualidad no es algo nuevo, ni tampoco una moda que se quiera implantar ahora. La asexualidad existe y ha existido desde siempre. Incluso, se dice que dentro del mundo animal, hay seres asexuales. También dentro de la literatura y el arte, donde el propio Gabriel García Marquez retrató en su Cien años de soledad a Remedios, un personaje incapaz de sentir atracción por nadie. Y existe también, según estudios publicados, en el 1% de la población mundial.
Un 1% de personas en el mundo son asexuales, o lo que es lo mismo, un 1% de personas en todo el mundo no siente atracción sexual ni hacia hombres ni hacia mujeres. ¿Significa eso que eligen vivir sin sexo? ¿Qué tienen aversión o rechazo hacia él? Absolutamente, no. Y es algo que María García, una chica asexual de 25 años y miembro de AVENes (Red para la educación y la visibilidad de la asexualidad para personas hispanohablantes) quiere dejar claro: "Hay personas que sí tienen deseo sexual pero que, por equis razones en su vida, están en periodos de bajo deseo y no quieren tener relaciones. Pero la asexualidad -explica- es una orientación sexual y, en la mayoría de los casos, los que nos calificamos como asexuales, lo somos desde que éramos niños".

El 11,6% entre 15 y 29 años no ha tenido sexo

Según el último Informe de Juventud, de 2012, el 11,6% de los jóvenes entre 15 y 29 años no ha tenido relaciones sexuales de ningún tipo. Aquí podría incluirse ese 1%. Sin embargo, existen algunas excepciones. "Ser asexual no es ser un célibe", aclara Montse, coordinadora de asexualidad en la asociación El Príncipe Lila. Un célibe no tiene relaciones sexuales porque no quiere o su religión se lo prohíbe. Tampoco tiene que ver con ser antisexual (estar en contra del sexo por verlo algo malo o sucio). En contra de lo que se pueda pensar, los asexuales sí pueden tener impulso sexual, y pueden incluso masturbarse. Una cosa es atracción sexual hacia alguien, aclara María, y otra el impulso como tal: "Puedes tenerlo [el impulso sexual], pero no encuentras a una persona que te atraiga sexualmente, que te ponga. Cuando ves a una persona, no piensas en acostarte con ella. Por otro lado, está el deseo sexual, que es querer tener sexo (aunque hay varias definiciones). Uno puede querer tener sexo con alguien por diferentes motivos, distintos a la atracción sexual. Por ejemplo, por curiosidad. O también por la sensación que se produce por la fricción genital".

"Un asexual sí puede tener sexo -confirma Montse-, aunque la frecuencia y necesidad no es la misma que la de otra persona". Es importante también diferenciar entre estética y sexualidad. Una falta de atracción sexual no implica una falta de atracción estética. "Un asexual te puede decir si alguien es guapo, pero no le pone nadie. Y ésta es la diferencia entre un asexual y un célibe o antisexual, que sí pueden sentir atracción, aunque por equis motivos deciden no responder a ella", expone Diana, una joven de 26 años.

Paralelismo con la comida

Nuria Jorba, psicóloga, sexóloga, especialista en coaching sexual y directora del centro que lleva su nombre, en Barcelona, hace un paralelismo con la comida. "Hay veces que comes por desconectar o por aburrimiento. Pero no realmente porque tengas hambre o porque sientas ese componente de placer que te da la comida". Aquí pasa lo mismo, hay personas asexuales que pueden masturbarse, por saciar la ansiedad, simplemente. Incluso los hay que tienen parejas que sí son sexuales y no les importa tener sexo para complacerles. No lo rechazan, sólo que no tienen la necesidad ni esa atracción sexual que se supone que debe haber en las relaciones de pareja.
La asexualidad, por tanto, es completamente diferente a las personas que durante un momento de su vida tienen bajo deseo sexual y rechazan o eliminan de su vida el sexo y las relaciones. Por ejemplo, hay personas que han tenido una experiencia traumática y han desarrollado ciertas fobias. O casos en los que el componente religioso y/o cultural cobran un papel destacado.
El principal problema del desconocimiento de la asexualidad es la falta de visibilidad. O "la falta de comprensión", dice Anna, de 19 años, que como tantas otras personas descubrieron la palabra "asexual" por Internet y se sintió enseguida identificada.

Descubrir la orientación sexual por internet

Lo mismo le pasó a Diana, que descubrió que era asexual con 19 años, cuando rastreando por Internet se encontró con la palabra que la definía. Esta falta de visibilidad se equipara a la homosexualidad de hace 50 años, una orientación castigada durante mucho siglos y que por fortuna ha conseguido salir del armario.
Personas como Lucia Lietsi o el antropólogo y editor Javier León Gómez han tenido mucha culpa de que la asexualidad se conozca un poco más a través de sus publicaciones, han hecho que mucha gente se sintiera "aliviada" y, sobre todo, comprendida. Javier escribió el libro 'Asexualidad ¿Se puede vivir sin sexo?' con una idea clara: "Fue tal el alivio que experimenté cuando descubrí que era asexual que sentí la urgente necesidad de compartirlo". "La asexualidad siempre ha existido -dice-, pero supongo que no es fácil ni para nosotros reconocer que no sentimos el sexo como los demás".
"Imagina cómo se puede sentir un adolescente que no siente la necesidad de experimentar sexualmente con nadie y que, además, cree que tiene que encajar en alguna de las orientaciones sexuales conocidas", reflexiona Lucía, autora del famoso libro 'Diario de una asexual'.
Para ella, el camino no fue fácil, pero al final, consiguió ver luz en la oscuridad del túnel. ¿La solución? Aceptarse tal cual era. «Me torturé durante muchos años tratando de buscar a alguien que me despertase ese deseo y no me importaba que fuese hombre o mujer. Después de años y de muchas experiencias fallidas, decidí aceptarme como soy. Poco después, descubrí en internet la asexualidad y, justo ese día, acabaron mis conflictos», confiesa.

Otras formas de intimidad

En estas personas hay componentes que ocupan un lugar más importante en sus vidas, ya que por el sexo sienten escaso o nulo interés. "La atracción de la gente sexual tiende a incluir el deseo de tener sexo, mientras que los deseos de los asexuales tienden hacia otras formas de intimidad", expone Aura Marqués, psicóloga general sanitaria y directora de la consulta Psicología Viva. Por ello, la amistad, la personalidad, la vida interior de las personas adquieren un valor más importante. Y es que muchos asexuales no hacen una conexión entre amor y sexo, pero sí sienten que pueden expresar su afecto. Es decir, "sentir, expresar amor y sentir intimidad sin ninguna actividad sexual", detalla esta especialista en Psicología.
Dentro de esta orientación sexual, como la definen muchos, existen multitud de claficaciones y de variantes. "Entre las personas asexuales también hay diferentes categorías: las que no tienen deseo sexual pero sí atracción afectiva o romántica, por ejemplo, o las que no sienten ni deseo sexual ni romántico", explica Carme Sánchez, psicóloga clínica y codirectora del Instituto de Sexología de Barcelona.
El caso de Javier es el primero. Él comparte su vida con otra persona que no se considera asexual. Sin embargo, según relata su propia pareja en el prólogo de su libro, "el amor es algo mucho más amplio que el sexo y se puede vivir lleno de amor sin necesidad de tener distintas prácticas sexuales". Otra forma de sentir, "otra forma de vivir", como define la experta en sexología Nuria Jorbá. "Los asexuales somos gente normal -concluye Javier León- y sentimos las mismas necesidades afectivas que los demás. Nuestro único hándicap es que no sentimos deseo sexual".

FOBIAS

En situaciones traumáticas como casos de violaciones o malos tratos, la víctima puede llegar a negar el sexo, incluso en ocasiones a rechazar su propio cuerpo. Por ejemplo, en el caso de abusos sexuales en la infancia, pueden pasar fundamentalmente, dos cosas: reaccionan con un total rechazo al sexo o con promiscuidad (hay quienes harán girar su vida en torno al sexo, cayendo incluso en conductas de riesgo). En estos casos, es importante hacer una buena intervención psicológica, que fundamentalmente, se se trata en volver a recuperar la confianza.

CULTURA

En países como Japón, se está volviendo muy común el síndrome del celibato. Según una encuesta publicada en 2013, entre los jóvenes de entre 18 y 24 años, el 45% de las mujeres y el 30% de los hombres no están interesados en el sexo. Uno de los motivos que toma fuerza, según explica Carme Sánchez, es el descenso en el índice de natalidad. Las mujeres ya no quieren tener hijos porque implica, en la mayoría de los casos, tener que dejar su puesto de trabajo y dedicarse sólo a ser madres. Y las mujeres ya no quieren ese papel.


RELIGIÓN

Muchos jóvenes, por cuestiones morales y/o religiosas, deciden llegar vírgenes al matrimonio. Pero también en esto hay ciertas variantes: hay quienes llegan vírgenes al matrimonio en lo que a coito se refiere y otros, en cambio, sin haber tenido contacto alguno con el sexo. De hecho, los datos pueden verse reflejados en el 'Informe de Juventud' de 2012: el 11,6% de los jóvenes entre 15 y 29 años no ha tenido relaciones sexuales de ningún tipo, pero el 6% sí han experimentado relaciones, aunque sin penetración. 

5 comentarios:

Anónimo dijo...

tengo mas de treinta años y siempre pense que era una persona extraña pero no de mala forma, especialmente cuando mis amigas se sorprendieron cuando les dije que me habia enamorado por primera vez en mi vida a los 24 años y del primer chico que conoci de verdad y senti que era mi "alma gemela" fue algo que hasta ahora me cuesta olvidar, pues desde entonces no he vuelto a sentir lo que esta persona me hizo sentir, solo he amado a esta persona con todo mi ser y despues solo he tenido alguna intimidad con otra persona a quien ame por tener mucho en comun pero jamas como a ese primer amor platonico, no siento atraccion fisica facilmente por personas que conozco en mi vida diaria y creo que mis compañeros de trabajo empiezan a creer que soy lesbiana o algo, siempre me comentan que el tren se me esta pasando y hablan frecuentemente de cualquier noticia relacionado con gays (ahora ultimo de la desaprobada ley de la union civil y cuantos artistas salieron del closet) y siento que eso tambien va dirigido a mi, ademas del hecho que nunca me he sentido comoda cuando las mujeres u hombres empiezan a hablar en doble sentido o de sus aventuras sexuales (acaso no hay cosas mas divertidas de que hablar? me preguntaba ingenuamente) por eso empece a buscar en paginas de internet sobre esto que nunca ha sido un gran problema para mi pero por los "ataques" verbales que estoy soportando ultimamente he sentido la necesidad de saber que pasa conmigo aunque he vivido tan bien siendo como soy a pesar que mis amigas año a año me preguntan porque no salgo con nadie y yo respondiendo siempre que nadie me gusta ni atrae, ya era hora de saber mas y descubro que todo este tiempo muchas personas pasan por esto e incluso existen blogs del tema e incluso nombre al "problema" y aqui estoy leyendo tu blog. Gracias, es el primero que leo en mi vida y siento que he encontrado una mina y estoy abriendo mis ojos a un mundo que hasta ahora era mi mundo normal pero que ahora entiendo que no era el normal para el resto de las personas. He vivido una vida demasiado ingenua por mi asexualidad que debo parecer una adolescente y quiza aun emocionalmente lo sea. En fin otra vez gracias.

Anónimo dijo...

Hola! Soy una chica de 18 años y quería contaros un poco mi caso para ver si me resolveis un poco la duda. Desde pequeña nunca he estado atraída fisicamente por nadie, siempre pensé que era algo normal hasta que mis amigas empezaron a estar con chicos simplemente porque eran guapos, yo lo intenté pero era algo que no me satisfacía para nada y que incluso a veces me daba repulsión. A partir de los 16 años mas o menos empecé a decir que era asexual de "broma" porque todas se fijaban en chicos menos yo. Ahora con 18 En mi clase conocí a una chica lesbiana y ella empezó a tontear conmigo hasta que estuvimos juntas tres meses. A raiz de esto empecé a plantearme que realmente era asexual, yo la amaba mucho y teníamos sexo mas que nada porque ella quería, porque a mi era algo que no me hacía falta. Ademas de esto empecé a pensar en que era ¿bisexual? ¿Lesbiana? Y seguía sim saberlo hasta que leí que a las personas asexuales les da igual el sexo de la persona con la que están porque lo que realmente importa son los sentimientos. Yo soy así, siempre me implico muchísimo a nivel emocional con la gente y me enamoro de una persona, no me fijo si es hombre o mujer, y aunque solo estuve enamorada una vez siempre he preferido tener buenos amigos a un novio o novia. Si bien es cierto que nunca he sentido un rechazo o asco hacia el sexo, simplemente es algo que no necesito. Sinceramente ahora mismo estoy muy perdida y necesito encontrar respuestas para saber quien soy y si todo esto que me pasa es algo normal. ¿Soy asexual? ¿Bisexual? ¿Tengo poco apetito sexual? Por favor, agradecería muchísimo una respuesta :)

Lucía dijo...

Hola amigas! Creo que tengo una respuesta que puede ser aplicable para ambas. El sexo y la sexualidad de cada uno es algo que viene implícito en nosotros mismos y de lo que no debemos renegar. Lo más importante es que os aceptéis como sois y que os dejéis llevar por vuestro instinto. Es cierto que existe una enorme presión social y mediática que parece indicarnos lo que está bien y lo que está mal en lo que al sexo se refiere. No permitáis que nada ni nadie influya en vuestra forma de ser o vivir si estáis a gusto con lo que sois y hacéis. ¿Qué importancia tiene enamorarse de un hombre o de una mujer? y, si no nos enamoramos ¿a caso es obligatorio? Mi consejo es que empecéis a conoceros y aceptaros como sois. Es difícil sí y lleva mucho tiempo pero sólo vosotras podéis descubrir lo que os hace felicces. Os invito a hacerlo. mientras tanto, seguir buscando información y veréis cómo,cada vez, es más frecuente que la gente sienta la misma confusión que vosotras. Es normal, esta sociedad está en proceso de cambio descubriendo nuevas formas de vivir el sexo. Estoy segura de que pronto habrá información asequible para que todos y todas podamos encontrar el modelo en el que mejor encajamos, aunque cada vez estoy más segura de que hay tantos como individuos. Espero haberos ayudado o al menos haberos animado un poco más. Un abrazo y ya sabéis dónde estamos.

Lucía dijo...

Chicas! Me he tomado la licencia de exponer vuestros comentarios en mi nuevo programa radiofónico "Entre tú y yo". Allí Mateo y yo trataremos de daros una respuesta más amplia. Un abrazo y muchas muchísimas gracias a vosotras por hacer parte de la solución de estos problemas que ya no son tan poco comunes. Esperamos que os guste el programa cuando lo escuchéis.

Anónimo dijo...

Pienso que mi pareja es asexual y me siento triste, el vale oro puro y es hermoso pero siento que a mi si me hace falta la parte sexual no se si a el le dolería que yo me desahogara por fuera c otra persona o de plano bloquear mi parte sexual pero no me gustaría pues me fascina disfrutarla, que difícil situación y lo peor es que el lo niega y no tolera hablar del tema, dice que es temporal pero obvio NO